1. Apiñamiento de los dientes inferiores
Con la edad, el hueso de la mandíbula pierde su densidad. Su tamaño deja de coincidir con los dientes, lo que puede conducir al apiñamiento de los dientes inferiores. Lo mismo puede ocurrir debido a otros problemas, tales como la respiración por la boca, hábito de lengua o traumatismo facial.
2. Diastema
El espacio entre dos dientes frontales se conoce como diastema, y puede desarrollarse por una variedad de razones: el apiñamiento de los dientes, las mandíbulas y los dientes desproporcionados, la presión de la lengua, etc. Las enfermedades periodontales son otro desencadenante de este proceso, debido a la inflamación.
3. Movimiento dental tras el tratamiento de ortodoncia
Nuestros cuerpos cambian durante toda la vida, y nuestros dientes también. Después del tratamiento de ortodoncia, es importante llevar un retenedor para mantener los dientes en la posición correcta.
4. Mordida incorrecta
¿Tienes dolores de cabeza o incluso dolores de espalda? Es posible que tu mordida no sea correcta, lo que ocurre cuando la mandíbula inferior y la superior no están bien alineadas. Esta patología se llama maloclusión y se corrige con un tratamiento de ortodoncia adecuado.
Todos estos cambios son completamente normales, pero eso no significa que tengas que vivir con ellos. El número de adultos que empiezan tratamientos de ortodoncia sube cada vez más. Con ocho u ochenta años, el proceso biológico del tratamiento de ortodoncia es el mismo. Los adultos tienen un tejido óseo más denso que los niños, por lo que el tratamiento puede demorar un poco más, pero la edad no impide que los dientes se muevan.
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